Deja de pensar.
Deja de sentir.
¿Se puede?
Sólo te pido que pares un momento, y respires.
Parece mentira, pero se nos olvida respirar.
Cuando respiras profundo, parece que se calma todo.
Se oxigena.
Crecen las posibilidades y se reducen las dificultades.
Merece la pena intentarlo.
Cuando respiras, estás aquí.
Creas calma en el caos, creas consciencia en la inconsciencia, creas presencia en el aquí y ahora.
Y desde ahí, todo se ve diferente.
Respira !!!